Bases sólidas, aseguran una casa para toda la vida

“Los cimientos de aquí de la casa son profundos, prácticamente parecen para construir un edificio”.

La familia Macías tomó la decisión de construir para tener su casa propia. Aprovechando que ya tenían su terreno, Jorge inició el proceso para solicitar un crédito de construcción con la Cooperativa de Ahorro y Crédito Santa Ana.

Jorge recuerda que, en el transcurso de hacer el crédito, la cooperativa le dio varias regulaciones, “en especial sobre los profesionales que se van a encargar de la construcción”, porque deben ser especialistas en arquitectura, ingeniería y conocimiento del suelo.

“Lo que si nos llamó la atención fue los estudios de suelo. La parte donde está construida la casa es un relleno, antes se usaba básicamente para cultivos; entonces, la cooperativa nos solicitó hacer un estudio para conocer la factibilidad que tenía el suelo del terreno para soportar adecuadamente una construcción. Ese fue el primer paso para poder acceder al crédito y empezar la construcción”.

Durante todo el proceso de construcción de su vivienda, la familia Macías contó con las visitas, guía y supervisión de un equipo de profesionales que se aseguraron de que esta vivienda cumpla con los requisitos para obtener la calificación como sismorresistente.

La Cooperativa de Ahorro y Crédito Santa Ana, es una de las instituciones financieras que ha accedido a recursos que son parte del proyecto “Mi casa desarrollo AFD”, el mismo que es impulsado por la Corporación Nacional de Finanzas Populares y Solidarias (CONAFIPS) con el apoyo de la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD).

Como parte de este proyecto se gestiona la entrega de créditos para la compara, construcción, reconstrucción de viviendas a través de las cooperativas y mutualistas en las provincias afectadas por el terremoto de abril 2016. Para la entrega de estos créditos es un requisito la presentación de estudios y planos que aseguren que dicha vivienda sea sismorresistente.

Para Jorge, Manabí ha experimentado un cambio cultural desde que vivieron el terremoto del 2016. “Este desastre nos cogió entre dormidos y despiertos, y se evidenció la negligencia en las estructuras que tenemos en la provincia. Desde ahí empezó la gente a buscar tener poquito más de seguridades a la hora de construir. Las cooperativas que van a dar créditos también se aseguran que los créditos de vivienda sean para construcciones resistentes”.

El proyecto “Mi Casa Desarrollo AFD” nació con el propósito de impulsar la adquisición de viviendas sismorresistentes para garantizar que no se repita la historia y que, en un eventual terremoto, la vida de las familias esté protegida por una construcción que cuente con las garantías.

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